Por Rebeca Fuentes.

mamá y amante de la crianza natural y respetuosa

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Soy amante del porteo, en nuestro caso, nos salvó la vida, y desde que descubrí las maravillas que puede hacer por una mamá en apuros el porteo, sólo quiero que personas como tú lo lleguen a disfrutar tanto como yo! 

Soy mamá de una preciosa niña llamada NOA, para mí tener a mi hija fue uno de los momentos más felices de esta vida, sobre todo ese instante en el que vi su cara por primera vez! (Sobredosis de oxitocina imposible de olvidar ;) 

En nuestro caso, descubrimos el porteo gracias a que fue una necesidad imperiosa, desconocía el termino de bebés de alta demanda hasta ese momento... De verdad, con todas las amistades que yo tenía que habían tenido bebés, nunca me encontré mi me contaron un caso de un bebé que tuviera la necesidad de estar pegada a su madre 24 horas... es precioso sí, pero extremadamente agotador cuando no estamos acostumbrados a maternar de esa manera tan intensa. 

Mi niña era un bebé que no se conformaba con un poquito, ella necesitaba a tres mamás para ella sola, para saciar su necesidad de apego. Hacía tomas cada 40 minutos, mañana, tarde y noche, (y no era un bebé de bajo peso) desde el minuto uno estuvimos con lactancia materna exclusiva, es más, estaban cosiendo mi episiotomia, y ella ya se había enganchado al pecho.

Una vez llegamos a casa, era extremadamente complicado poder conciliar la vida diaria, más allá de las tomas, además que por mi parte no tuve tribu, ninguna red de sostén que me ayudara simplemente a cogerlo en brazos si lloraba, en el caso de que yo tuviera que ir al baño... Qué trivial esto de ir al baño...en mi caso se convirtió en un lujo, una ducha en una utopía! 

por casualidad mi matrona me habló del porteo, ya que yo llevaba una mochila no ergonómica, una colgona malísima, y por desconocimiento pensaba que así a lo mejor, puesto que me daba cuenta que mi bebé no lloraba...

Lo primero que probé fue un fular elástico... La sensación fue maravillosa, era como volver a estar embarazada, esa sensación de protección, de contención, era como un abrazo a mi bebé, y además, yo podría seguir haciendo todo lo que mis fuerzas me dejaran! El simple hecho de salir a caminar, a mí me ayuda muchísimo con las hormonas postparto, y con la introducción a la nueva rutina, pues no siempre es fácil hacerte a la idea que el reloj desaparecerá de tu vida...

Para mí poder ir a hacer algo tan sencillo como tender la ropa mientras estaba tranquila que mi bebé estaba dormida y atendida, era MAGIA! 

las familias de niños de alta demanda, nos sentimos muy incomprendidos por la sociedad en general,pues esta sociedad consumista y estresada en la que vivimos, para nada está preparada para maternar, para escuchar a un bebé, y para adaptarse a sus ritmos. Está sociedad ve normal dejar a un bebé de pocos días solo en su habitación, tiene que aprender a dormir sólo en su cuna, además ser un bebé "bueno" y con esto quieren hacer referencia a que no parezca que mamá y papá han tenido una cría, es decir, ese bebé que apenas llora, que no se queja por los gases, o simplemente porque le pica un pie. 

Para ti como madre, si atiendes ese llanto constantemente para tratar de calmar a tu bebé y que la hormona del cortisol no invadan su cerebro completamente, te tachan de blanda, de consentidora, -que lo vas a malcriar, -que te tiene cogido la medida, -que si cada vez que llora le metes el pecho en la boca, se te va a poner como una morsa, -que te está usando de chupete, porque no tiene hambre, -oooootra vez con la teta en la boca??? Eso es porque tu leche no alimenta, tu bebé se queda con hambre, ahí solamente tienes agua...

Esta sociedad, no está hecha para maternar